Ante todo, es vital cambiar la forma de pensar de una «batalla» por la custodia a una disputa por la custodia. Calificar los desacuerdos sobre la custodia de «batalla» convierte a los niños en peones de una lucha entre sus padres. Los niños son personas, no peones. Los tribunales de Nueva Jersey están obligados a determinar la custodia entre dos padres que se separan o divorcian según lo que más convenga a los intereses de los hijos. Obviamente, si te encuentras en esta situación, tú y el otro progenitor de tu hijo no estáis de acuerdo en qué es lo mejor. Dicho esto, es poco probable que el Juez esté en condiciones de determinarlo tampoco, pues sólo tendrá una pequeña ventana a vuestras vidas y a la de vuestros hijos. Entonces, ¿cómo puedes prevalecer?
- Demuestra al Tribunal que tienes voluntad de trabajar con tu cónyuge, por difícil que sea. Si es necesario, recurre a ayuda externa, es decir, a un terapeuta o a un coordinador de paternidad para que te guíe.
- Contrata a un abogado experto en asuntos de custodia de menores. Tus hijos son lo más importante de tu vida. Ahora no es el momento de renunciar a obtener la mejor ayuda jurídica disponible.
- Por supuesto, probablemente sea uno de los momentos más agitados de tu vida: emocional, económica y temporalmente. Aunque está claro que tienes que cuidarte para ser el mejor padre posible, no dejes que esto te reste tiempo para pasar tiempo de calidad con tu(s) hijo(s). Estate ahí para ellos.
- Si tienes programado tiempo de custodia con tu(s) hijo(s), no faltes. No llegues tarde ni canceles si no hay una emergencia grave.
Otras cuestiones cruciales que pueden sorprenderte:
- Nuncahables maldel cónyuge de tus hijos. Cada uno de ellos es una mitad de ese progenitor, y menospreciarlo puede hacer que se sienta fatal consigo mismo.
- No permitas que el/los niño(s) participe(n) en modo alguno en el litigio sobre la custodia. Aunque esto no siempre sea posible si un psicólogo forense ha pasado a formar parte del litigio por la custodia, asegúrate de no ser tú quien informe al niño o niños en el proceso. Con demasiada frecuencia se escuchan conversaciones entre tú y tu sistema de apoyo o tu abogado. No dejes que ocurra.
Lo más importante es demostrar al Tribunal que eres un padre colaborador, implicado, competente y cariñoso.